Las cosas ocurren porque tenían que ocurrir

¿Por qué ocurre esto?¿Por qué ocurre lo otro?¿Por qué?¿Por qué?¿Por qué?

Toda la vida preguntándonos el ¿por qué? de todo, ¿para qué? si ya ha pasado, y lo pasado pasado está ¿o no?, porque aún no se ha inventado ningún aparatito que nos haga retroceder en el tiempo, o por lo menos si existe, yo no tengo constancia de ello.

Vale que por naturaleza, más de uno somos de darle muchas vueltas a todo y excavar hasta lo más profundo, ¿para què? para nada, para hacernos más daño, para sufrir más, para estar recordándolo en cada momento, como nos gusta hacernos sufrir.

Hace 7 horas abro un e-mail y de repente se me queda la pantalla en color naranja, intento abrir el msn y me dice que mi e-mail no existe, no puedo reaccionar, mi cuenta de hace 5 años, todos mis contactos durante estos años de colegio, instituto y ahora universidad, direcciones de gente de Finlandia, Polonia, Francia, Italia ... perdidas, con sólo un click, 5 años de mi vida borrados, eliminados para siempre, no hay vuelta atrás, soy consciente que muchisimas de esas direcciones son irrecuperables, que nunca más podré tener contacto con ell@s, ¿por qué? ¿por qué me ha tenido que pasar a mi esto? ¿por qué yo? ¿y por qué hoy?, justo un dia antes del examen de historia, no, me niego a seguir preguntándome, a seguir recordándomelo cada 2 segundos.

Ya venía pensando hace unos meses, que tenía que hacer una gran limpia de este pequeño mundo de luces y sombras, hay mucho más fuera de aquí que dentro, si realmente quiero hablar con alguien o conocer a alguien, tengo su móvil, puedo quedar en persona, muchas de las direcciones yo creo que nunca habia mantenido una conversación con ell@s, quizás un simple 'hola' y 'adios' o un ¿qué tal estás?.

La gente que realmente me importa y con la que quiero mantener relación seguro que recupero el contacto, que en este mundo pocas cosas son imposibles.

Si ha pasado, pasado está, y si pasó es porque tenía que pasar, antes o después, pero pasaría.
¿Por qué? porque si y ya está, no hay que darle más vueltas, hoy me ha tocado a mi y mañana le tocará a otro, hay que asumirlo.

Las cosas que pasan, son porque tenían que pasar.